Cuando llega el momento de realizar una mudanza de hogar, nos vamos a encontrar con muchos los objetos que hemos ido acumulando a lo largo del tiempo en nuestra antigua casa.
Enseres que, en muchos casos, representan recuerdos que queremos conservar. Los libros son ese tipo de objetos que nos han acompañado durante años y de los que cuesta desprenderse.
Por eso, es importante seguir una serie de consejos para que, durante un servicio de mudanza, al igual que otros enseres, los libros no sufran ningún daño.
Lo primero de todo, y si quiere que la mudanza tenga un buen resultado, lo más aconsejable siempre es contratar los servicios de una empresa de mudanzas cualificada. Para ello, es interesante solicitar varios presupuestos hasta encontrar el que se ajuste a sus necesidades económicas y de logística.
Otro de los puntos a tener en cuenta, es conocer el espacio del que se dispone en el nuevo domicilio para guardar libros y contar con un lugar adecuado donde guardarlos en el caso de no poderlo hacer en casa. Para casos así, es interesante saber si la empresa de mudanzas ofrece el servicio de guardamuebles.
Lo más recomendable es dejar el embalaje de enseres en manos de la empresa encargada en realizar la mudanza, libros incluidos. Si por lo contrario, prefiere realizar usted esta operación, no debe olvidar hacer una serie de tareas si quiere tener localizados sus libros durante todo el proceso y una vez finalizada la mudanza.
- Haga un registro de los libros que posee para tener constancia del volumen de su colección.
Una vez realizado el inventario, separe los libros que realmente tienen valor o son interesantes para usted de los que cree que puede prescindir. Las mudanzas son un momento ideal para reutilizar, reciclar, vender e, incluso, donar objetos y libros que ya no se necesitan. Con esto ahorrará mucho espacio en su nuevo hogar.
- Si en su biblioteca personal tiene libros valiosos (incunables, primeras ediciones, raros, dedicados), es importante que los embale de una forma aún más cuidadosa, guardándolos en cajas de calidad, separadas del resto y perfectamente identificadas. En situaciones delicadas como esta, lo más indicado es dejar las labores de embalaje a especialistas en mudanzas.
- Los libros son objetos pesados por lo que debe tener en cuenta el uso de cajas de tamaño reducido y resistentes para su traslado. Cajas grandes con muchos libros son pesadas y difíciles de mover.
- No olvide etiquetar todas las cajas con el contenido de su interior, también las que guardan libros. Para encontrar los títulos fácilmente, es interesante, durante el inventario, realizar un listado que especifique en qué cajas se han embalado. Puede parecer una tarea algo tediosa, pero ahorrará mucho tiempo si busca un determinado libro o si van a estar guardados en cajas durante un largo periodo de tiempo y necesita que estén perfectamente localizados.
Con estos sencillos consejos para mudanzas, su biblioteca personal llegará sin problemas a su nuevo hogar, donde podrá seguir disfrutando de sus libros.